El elemento más
característico de la danza árabe es el “caderín”, que corresponde a un cinturón
o pañuelo de monedas que se amarra a la altura de la cadera. Hoy en día son
múltiples los materiales con los que se realizan, desde imitaciones de monedas
colores plata, oro y bronce, hasta cuentas, canutillos, mostacillas, cortes de
espejo o piedras semi-preciosas.