ZAPATILLAS DE PUNTA

Son un tipo de calzado de ballet similar a las zapatillas normales pero con refuerzo en la parte anterior de las mismas. Su objeto es que las bailarinas se eleven sobre ellas apoyando el peso de todo su cuerpo sobre la punta. Su objetivo es proporcionar una apariencia ligera y estilizada de la bailarina durante la representación, que parezca levitar sobre el suelo o que no haga ruido al caer tras un salto. 

Su origen se remonta al nacimiento de los ballets románticos en el siglo XIX. Se considera que una de las primeras bailarinas en emplear este tipo de zapatillas fue Marie Taglioni en el ballet La sílfide en 1832 utilizando la técnica de puntas. En un principio, las bailarinas introducían algodón para reforzar la punta mientras que en la actualidad la zapatilla cuenta con una estructura rígida en la que se apoyan los dedos. Existen zapatillas con diferente nivel de rigidez en su suela. La elección de una u otra dependerá de la bailarina en función del grado de fortaleza de su pie.